domingo, 8 de abril de 2012

Grupo 7 (Alberto Rodríguez Librero, 2011)

Durante mucho tiempo los aficionados españoles al fútbol tuvimos que convivir con la "furia española". Es decir, con el tópico de que la selección española debía ganar los partidos en base a conceptos tan trasnochados como "orgullo" y "raza". Sobra decir que nunca llegamos a ninguna parte. Curiosamente en los últimos cuatro años el fútbol español ha conquistado el mundo, tanto en la selección como en los clubes, precisamente cuando se ha dejado de lado "la furia", y se ha optado precisamente por lo contrario la técnica y el manejo cuidadoso del balón.
          ¿Por qué comienzo una crítica de cine con una idea futbolística?  Porque el cine español también ha sido prisionero de sus propios prejuicios y fantasmas, y ha sido necesaria una nueva generación de directores sin complejos para liberarlo. 
          Sé que lo que voy a decir tal vez no sea del agrado de muchos. Durante demasiado tiempo las películas españolas han sido verdaderamente insufribles. Había una serie de tópicos que todas debían cumplir: una profunda ideologización, una sobredimensación de los aspectos grotescos y sexuales de la vida, y una serie de temas recurrentes (la guerra civil, una peculiar forma de hablar de la marginación social, las obsesiones sexuales, etc.) A mi modo de ver, todos los aspectos convergían en un cine muy pedante y pretencioso, si no en la forma, si en el fondo. De hecho según la "inteligetzia" la máxima muestra de incultura era que no te gustaran las pelis españolas, sobre todo las de Almodóvar. Y debo confesar una cosa: ni me gustaban las películas españolas en general, ni las de Almodóvar en particular.
         Digo todo esto, porque el cine español esta experimentando una esperanzadora regeneración, que nos alegra a los cinéfilos y probablemente lo reconcilie con el público nacional e incluso internacional. Y esa regeneración viene del gran olvidado: el cine de género. "Grupo 7" es un magnífico ejemplo de lo que digo. Es una muy buena película policiaca, llena de fuerza y energía. Las escenas de acción, que en otro tiempo hubieran sido ridículas, no desmerecen en nada a la de la magnífica saga de Bourne, por poner un ejemplo. Es un film convincente y que te mantiene en vilo hasta el final. Y no penséis que es un clon del estilo o del contenido norteamericano. Es genuínamente española (sobre todo, andaluza), en su trama y en sus diálogos, y esto que no hace mucho hubiera dado vergüenza ajena, ahora resulta un valor que la hace aun mejor película. 
          Grupo 7 no es estupenda película de acción española, simplemente es una estupenda película de acción. Para ilustrarlo con un ejemplo, me parece mejor que "Training Day" en casi todos los aspectos. Yo soy el primer sorprendido de escribir esto.

3 comentarios:

  1. Yo la he visto y me ha gustado mucho. Estoy de acuerdo en casi todo contigo.

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  2. Yo si estoy de acuerdo contigo, tampoco soy una gran amante del cine español, pero esta película no es como las españolas que he visto hasta ahora, la historia es super original, los escenarios geniales, y grandes persecuciones y hostias como panes! pero no como las de Bud Spencer, sino de verdad. Y el toque del habla cevillana le da un toque grasioso, para romper de vez en cuando con la crudeza de la peli. Yo ya la he recomendado.

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  3. Si ya tenía ganas de verla, después de estos comentarios… ¡estoy ansiosa! =)

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