martes, 21 de agosto de 2012

The Terminator I y II (James Cameron, 1984-1991)

Las dos entregas de The Terminator seguramente formen una de las más interesantes "dilogías" del cine fantástico. Separadas por tan sólo siete años, son dos películas totalmente distintas, pese a la abundancia de lugares comunes, que pertenecen a mundos diferentes.
         La primera entrega era la ópera prima de un director desconocido, realizada con un presupuesto bajo y con dificultades para su distribución, y protagonizada por actores desconocidos. Además pertenecía a un orden mundial muy concreto: el de la guerra fría, con dos superpotencias nucleares enfrentadas, con la capacidad de arrasar la humanidad entera cientos de veces, mientras el resto del mundo asistía impotente al terrible espectáculo de las amenazas mutuas, rezando para que ninguno de los dos gigantes diera el primer paso de la aniquilación. Pese a su escasa repercusión inicial, la película poco a poco se fue convirtiendo en una obra de culto que encumbró a todos los que participaron en ellas (desde el director al encargado de efectos especiales, pasando por los actores). Aún así creo que es una película poco vista y peor comprendida.
      Su continuación fue una superproducción en toda regla, con el presupuesto más alto de la historia en su momento, protagonizada por una estrella (Arnold Scwarzenegger) que por sí solo reventaba taquillas. Desde el primer momento se convirtió en un fenómeno sociológico y en una de las películas más esperadas de la historia. Técnicamente marcaría un antes y un después en la historia del cine. Terminator II mostró que, con la nueva generación efectos especiales creados por ordenador, no había nada que no pudiera hacerse... el cine entró en una nueva era, una en la que la única limitación técnica era la imaginación, en la que por cierto aún vivimos. Además, pertenecía a un orden mundial mucho más despejado, en le que la amenaza nuclear había desaparecido del horizonte.
    Así pues, en cierto modo la relación entre una y otra recuerda a la de David y Goliath. Creo que si se hiciera una encuesta la inmensa mayoría del público optaría por la segunda parte. Técnicamente esta a años luz, es mucho más trepidante y tiene un espíritu mucho más aventurero. Además, pese a ciertas escenas violentas, es una película agradable de ver y que incluso puede considerarse apta para toda la familia. Ha envejecido formidablemente bien y sigue resultando tan espectacular y entretenida como cuando se rodó.
    Sin embargo, sin desmerecer su estupenda secuela, yo me quedo con la primera. Esa humilde película contiene uno de los mejores guiones de la historia del cine fantástico, al que casi treinta años después sigo sin encontrarle fisuras. Está admirablemente dirigida y la forma en que mantiene la tensión admite pocas comparaciones. Tuve la suerte de disfrutarla cuando se estrenó y no dejaba de sorprender, pues su desarrollo desafiaba toda logica y te dejaba sin aliento. Oscura como pocas, estaba protagonizada por uno de los villanos más terroríficos e implacables que se habían visto en la pantalla. Un personaje que daba auténtico miedo y que te causaba una terrible sensación de impotencia e indefensión.
      Creo que mi decisión está clara, aunque sigo considerando a la segunda una magnífica película de acción. Pero la primera parte es algo más... una obra maestra. Desde mi punto de vista la mejor película de cine fantástico de los ochenta (pese a todos los Blade Runner del mundo). Alien le hubiera discutido el trono, pero es de 1979, así que le dejó el despejadito. 
       Envidio a quien no la ha visto por tener la oportunidad de descubrirla.

1 comentario:

  1. La verdad que es una maravilla de película. La ví siendo muy pequeña y no la recordaba. Al verla la semana pasada, me sorprendío que trás tantos años seguía siendo que te mantenía en tensión en todo momento, no pasán los años por ella, claro que en los efectos especiales y en la música si... pero por lo demás, no. Tu crítica como de costumbre le hace justicia, y redactada como siempre maravillosamente. Un abrazo Chejofan.;)

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